Lo único

Producto de repeticiones: reflexiones, traslaciones, rotaciones, todo lo que el hombre diseña es como la multiplicación de un número, hecho forma. En la ropa llevamos repeticiones, en la arquitectura, en las hojas multiplicadas de los libros, y cuadernos.
¿Qué es lo único? Todo obedece a reiteraciones. Duplicar es una forma de ordenar, de hacer simetrías.
Un trazo aleatorio se vuelve ordenado al duplicarlo.

Además, se puede decir que lo azaroso es desagradable a nuestra vista, como el vuelo de una mosca: movimiento browniano. Movimiento que no sigue ningún módulo, o patrón. Sería como un libro con las hojas dispares.

La adición no similar es azarosa en este sentido, parte de la arquitectura orgánica. Adicionar elementos no iguales. Si no son iguales, y los vamos amplificando, también es una relación: sería un fractal. Si no son iguales, y no tienen relación, se asimilaría al trazo fortuito de las ciudades: el simple orden del tiempo. El tiempo tiene elementos aleatorios: depende de la voluntad de las personas. Las personas en una calle, por ejemplo: la forma en que transitan y se dispersan. No hay patrón, medida, o relación entre los pasos, aunque el paso de cada persona implique un ritmo que tiene que ver con la respiración.

Son reveladores los proyectos urbanos por eso: una ciudad aparece con un cubo, nuevo, por ejemplo. Con un nuevo prisma, una marca en determinado territorio. Por temas de gestión, luego, el prisma no se construye, pero se hace una pirámide en otro lado. Cosas de voluntad. La ciudad así se construye en forma aditiva, casi azarosa. Los proyectos urbanos parecen grandes despliegues y energías de voluntad.
Aparte de la idea, la adición de lo nuevo además tiene que ver con el bienestar. Si se filmara a una persona en su pieza en un momento de ocio veríamos movimientos sin razón aparente. Ora se recuesta en la cama, ora en un diván, ora se sienta en un escritorio, o pasea con un libro. Movimientos sin razón aparente. Si llegaran a tener sentido, seríamos clones. Gana, deseo, bienestar: el movimiento natural de las personas es fluctuante, browniano, como la persona quiere, o como los alumnos del profesor Keating, cuando les dice que caminen a su manera, por ejemplo.

Lo único hecho de repeticiones
Cuando el arquitecto en forma excepcional diseña una forma única, ésta se disgrega en partes, repetitivas, de módulos. Se estructura con repeticiones, con elementos normalizados. Cuando Jean Nouvel plantea la torre Agbar, es un contraste, pero sus elementos a escala humana están duplicados: es lo que sirve para construir.

Se da la situación así de una forma original propuesta, y la construcción de la forma, como desarrollo y funcionamiento, que es una cosa distinta, o un estado posterior. El contraste luego puede ser la operación de novedad sobre secuencias más automatizadas.

Simetría y asimetría
El tejido es un trenzado diminuto, un enrejado, una repetición. Prácticamente todas las culturas descubren en la simetría una forma de orden. Estampar es una repetición en espejo.

Mosaico y puntillismo: la pieza
Los mosaicos se pueden generar a partir de una pieza básica (tesela, baldosa) mediante la combinación de diferentes movimientos. Así un elemento diminuto puede llenar un espacio. Este concepto es la base de varios movimientos y estilos, y ciertamente es una forma natural de orden.
Interesantes páginas de generación de mosaicos:
http://www.uhu.es/ceferino.parra/Artemate/MOSAICOS.htm
Dibujo de mosaicos

La teoría matemática del puntillismo
El puntillismo, que aparece en la pintura en 1880, quiere dar un fundamento científico a la observación de la realidad, y a la ejecución de los cuadros. Así procura un estudio de interacción de colores, de manera científica. Una estructuración de las pinturas a partir de la más pequeña de las unidades: el punto.
Así los seguidores de este estilo lograban acumular, en superficies reducidas, toda la gran variedad de colores y tonos que conforman la apariencia del objeto, con una intensidad de luz y vibración, mayor que la de sus predecesores.

Georges Pierre Seurat, uno de los exponentes del puntillismo (arriba), que con el tiempo se irá suavizando, transformándose en mosaicos de colores, asimilándose al modernismo.

Retrato de Félix Feneón, Paul Signac

La pieza asimétrica
Las generaciones geométricas más complejas tienen la particularidad de permitir asimetrías, con cierto grado de cálculo y control. El resultado es de aspecto más orgánico, por lo mismo menos ficticio y decorativo. Además produce la percepción de lo único, del terreno agreste.

Ejemplo de la fachada de “C4: Contemporary Art Center” (Córdoba, España, 2013), de “Nieto Sobejano Arquitectos”, la cual emplea paneles tipo GRC, de hormigón armado con fibra de vidrio, blancos y moldeados. Un relieve de hexágonos irregulares, que varían en tamaño y profundidad, intersticios que de acuerdo a su posición, pueden ser estancos o perforados, permitiendo pasar la luz.

http://www.dezeen.com/2013/03/22/contemporary-art-centre-cordoba-by-nieto-sobejano-arquitectos/

Así como hace poco pensaba sobre la modulación, pensé luego en su opuesto: lo único, y quise enunciarlo en el presente artículo. Afectado, como todas las cosas humanas, por la repetición, trae el contraste, y una nueva mirada sobre el entorno. Lo único hace mirar de otra forma. No ver como una manzana, o pera más, sino tener la virtud de observar la pila de rojos y verdes desde otra perspectiva. Parece así otro tema a destacar, que se deriva de la modulación.