Vladimir Brontis

Friday, April 12, 2024

Arquitectura, libro y construcción

La arquitectura ha tenido estrecha relación con el libro a través de la historia, como contenedora, en bibliotecas y librerías, como inspiración, y como tema. Como su sustento, fundamento, y como el marco cultural y social en que se construye. La cultura da sentido y dignidad a los actos que suceden en las construcciones, y se plasma como registro en los libros.
Los libros son registros de nuestras acciones. Y de alguna forma modifican e influyen en las acciones, al plantear principios, que las orientan. Es cuestión de recordar la importancia que cobran los tratados, en el periodo del Renacimiento, y los avances sociales, importancia y poder que creaban en su entorno, al reflejarse en la praxis, en la realidad. Las ilustraciones de ciencia significaban avances en la medicina, y en la tecnología. E imaginaban universos, y culturas, en la teoría.
Arriba: croquis propio de la Nueva Biblioteca de Alejandría (1996, Egipto), de la firma Snøhetta, que evoca varias características de la original, hito desaparecido de la Antigüedad.
Construye
La Escuela de Arquitectura de la UCV ha editado libros muy interesantes, especiales, que en su factura comunican una intención. Interés que puede partir en la portada, ya sea recortando, horadando, o haciendo relieve. En los libros de poesía de Godofredo Iommi, por citar un ejemplo vinculado a la Escuela, toma especial atención situar la palabra, como marca en el “terreno”, o emplazamiento, de la hoja en blanco. Poesía territorial, física, donde el blanco, la parte vacía, también empieza a cobrar significado. Me llamaba la atención visitar la biblioteca de arquitectura, cuando estudiaba en El Comendador, y hojear esos libros, inspiraban para proyectar.
Subyace el tema de los libros objeto, con interés en sí mismos, que en sí llevan parte de los diseños e ideas que se proponen en el interior. Dan lugar a un “gesto de novedad”, al interpelar, y buscar su espacio, de otra manera.
A través de Iommi se llega a una arquitectura, me llama la atención. Otros creadores no tienen ese poder convocante. Son etéreos, son filosóficos, Iommi en cambio es constructivo. Sigo pensando, sin embargo, que, actualizándose en el tiempo, desde esos años dictatoriales, de la segunda mitad de los 70, y todos los años 80, una mayor apertura política nos llevaría a mejores resultados, o por lo menos a otra mirada, a una forma de permanencia. Nos daría un sello, de una escuela más militante. Un sentido más político, lo he escrito en posteos anteriores.
La posición de Iommi, en este aspecto, no parece determinante: es pedagógico. Parece impulsar a un alumnado, es lo que comunica. No parece referir una ideología determinada. El alumno de su asignatura puede seguir uno u otro camino.
La pedagogía abre caminos al estudiante. Es un interesante tema: hasta cuándo la cultura es docencia. O si la teoría es docencia. O si Le Corbusier es docencia.
Luego uno piensa en las ventajas y limitaciones de la enseñanza. Así la desventaja, de un movimiento-escuela, es que virtualiza en un “podría ser”, en una permanente función condicional, las cosas que ejecuta. Y luego los resultados son un tanto efímeros.
Sin embargo, todo se resume en una cosa, en una palabra: construye. En un “vamos a hacerlo”. Es el sentido último.
No tiene sentido inculcar algo si se niega en los hechos. Se debe ser consecuente. Enseñar algo que no se va a construir sería un contrasentido. Iommi luego habla a un alumnado, no a seguidores políticos. Es su tono permanente.
“¿O bien el compromiso político es inevitable?”, se pregunta el poeta en “Carta del Errante”, donde también cita a Louis Aragon, poeta y académico comunista. Llama la atención, en artículos fechados en la década de los 70, bastante feroz en represión. Entonces, esos años cuando la Ciudad Abierta de Ritoque coincidía con el campo de concentración de Ritoque (que quedaba cerca, 5 Km al norte), y lo que implicaba: la prisión del arquitecto Miguel Lawner, y otros artistas.

El cálculo de un movimiento-escuela
En su texto “G.W. Leibniz, N. Goodman y la noción de complejidad: Lineamiento de una teoría”, parece buscar una estructura ósea. Un método de cálculo, que se aplicará en la arquitectura, desenvuelta pero disciplinada, de la Escuela. Busca un sistema, un procedimiento, que lleve a hacer. Más allá de posiciones ideológicas.
Uno no puede decir que Leibniz era conservador, si era un periodo en el que había que tener diplomacia, previo a la Revolución Francesa, por eso parece un interesante tema, de búsqueda de voz, de lenguaje.
Uniendo esta lectura a “Apertura de terrenos” (1971) y “Cálculo poético de Amereida” (1967), de alguna forma, pienso que este posteo trata sobre la elaboración, la complejidad. El verse ante la necesidad de construir la idea, y de producir resultados concretos. http://amereida.cl/Apertura_de_Terrenos
La Biblioteca de Alejandría
La Biblioteca de Alejandría fue una de las más importantes en la Historia, un referente, así como uno de los mayores acopios culturales de la Antigüedad. Fundada en el siglo III a. C., en el sector administrativo de la ciudad egipcia de Alejandría, durante el período helenista, la biblioteca formaba parte de una institución conocida como “Museion”, dedicada a las nueve musas patrocinadoras de las artes. Su creación puede haber sido idea de Demetrio de Falero, estadista ateniense exiliado, que fue su primer bibliotecario, o de Ptolomeo I, quien, al igual que Alejandro Magno, procuraba difundir el helenismo. Sin embargo, no fue construida sino hasta el reinado de su hijo, Ptolomeo II.
https://es.wikipedia.org/wiki/Biblioteca_de_Alejandria
https://historia.nationalgeographic.com.es/a/biblioteca-alejandria-destruccion-gran-centro-saber-antiguedad_8593

¿Cómo era la biblioteca de Alejandría? Arquitecturas que actualmente no sabemos cómo eran, que llegan por referencias y descripciones. Las reconstruimos como un recuerdo.
https://writeclub1968.wordpress.com/2020/06/17/la-biblioteca-de-alejandria-mitos-vacios-y-logros-oscurecidos/
https://www.cinconoticias.com/como-se-monto-biblioteca-de-alejandria/
Arriba: distintas versiones de la posible fisonomía de la Biblioteca de Alejandría.

Sobre la comprensión del mensaje
Hay diferencias en cómo entiende cada persona. La idea es común, la forma de acogerla depende de cada individuo.
La gente respeta y teme a las sucesiones de gobierno por eso, por ejemplo. Las ideas por lo general no son administradas de forma similar por líderes diferentes. Hay cambios entre uno y otro, incluso en la misma tienda.
El conjunto de principios que convoca, sin embargo, debiera ser una continuidad.
Los concursos de arquitectura son reveladores, sobre cómo cada arquitecto comprende, y proyecta en un sitio. Partidos disímiles, para un mismo programa, entendidos de distinta forma. Lo que otorga una riqueza. Partidos similares hacen un concurso aburrido.
Se puede pensar el ejercicio de como ven distintos dibujantes una misma descripción. Y sopesar la versión propia para una descripción, por ejemplo, con otras versiones.
Arriba: las causas de la desaparición de la Biblioteca de Alejandría son oscuras. Este grabado (1876) muestra un probable incendio, del año 47 a.C., durante la guerra entre Cleopatra y su hermano.

Los libros especiales
El libro comparte con la arquitectura ser un contenedor. También es un sustento, en cuanto a objeto.
El propósito del libro es difundir, mostrar, ser un registro de lo circundante, en el lenguaje de Husserl, que he estado repasando este último tiempo, durante la elaboración de mis proyectos, y trabajo de oficina.
Los libros religiosos del medioevo, llamados “Libros de Horas”, que las personas diseñaban para sí mismas, y que también se obsequiaban, son primeros ejemplos de manuscritos creativos. Del mismo tiempo medieval, los llamados “volvelles”, son libros que contienen discos giratorios unidos a ejes, y a las páginas, anteriores a la invención de la imprenta. El lector podía girarlos para hacer cálculos, o estudiar y visualizar los sistemas astronómicos y filosóficos de ese tiempo. Uno de los autores que emplearon este mecanismo fue Ramón Llull, poeta, filósofo y místico (Mallorca, 1232-1316).
En el Renacimiento, gracias a la imprenta, la difusión de los libros se dispara, y algunos incorporaban páginas desplegables. Es el caso del “Liber Cosmographicus”, obra del siglo XVI, del matemático alemán Peter Apian, donde se podía interactuar, con mapas e instrumentos astronómicos en papel. En la misma época, aparecen insertos interactivos para describir el cuerpo humano, presentar referentes de arquitectura, y explicar astronomía y filosofía. La prensa de Gutenberg, a partir del siglo XVI, consolida las ideas del Renacimiento, y el surgimiento de la Ilustración.
En el siglo XVIII, el editor inglés John Newbery comienza a publicar fábulas, en formato pop-up. Sus libros se vuelven de culto, en Inglaterra y Francia, desconociéndose sin embargo los autores de la mayoría de las publicaciones.
Los libros cartoneros, desde los primeros años del siglo XXI, pueden entenderse como encuadernaciones a mano, con tapas de cartón. Dado que el término fue popularizado por las propias editoriales cartoneras, su definición más usual es la de "ejemplar producido por una de esas editoriales", basándose en la economía y humildad de los materiales, y su carácter artesanal.
https://www.pixartprinting.es/blog/historia-libros-desplegables/
https://www.domestika.org/es/blog/4992-breve-historia-de-los-libros-pop-up
Arriba: Volvelle astronómica del siglo XIV: un libro especial.

Elaboración, proyecto y detalle constructivo
Procuro dar nueva lectura a mis proyectos estos días.
La gente no sabe lo que demoran algunos trámites, como el hidrogeológico, lo que da tiempo sin embargo para elaborar, y ajustar. Pensé que elaborar es otro tema. A veces se puede estar sobreelaborando. O a veces el tema está demasiado crudo.
El evangelio de San Marcos es más agreste, el de Juan es muy elaborado. Son dos formas de ver, de abordar.
Haciendo calces y ajustes, me encuentro desarrollando las estructuras, viendo el total y sus pormenores. Desde el detalle constructivo a aspectos de contexto. Actualizando asimismo la  arquitectura con las resistencias requeridas.
Procuro que tenga buenos detalles, pensados, donde se delegue poco, presentando decisiones claras, en feedback o retorno con arquitectura. De hecho, en algunos figuro tanto como arquitecto, como calculista, lo que permite comunicación.
Arriba: croquis propio de la Casa de los Nombres (Ritoque, Chile, 1992)
Arriba: empleo de vigas reticuladas como recurso constructivo, Ciudad Abierta de Ritoque. En consecuencia a su tesis: una descomposición de pequeños elementos constructivos que conforman un total.

Cálculo poe (lí) tico
Un aspecto interesante de la poesía de Iommi es tal vez poco conocido: su vínculo con el cálculo. Su búsqueda de densidad, por ejemplo, en la filosofía de Gottfried Leibniz, y Nelson Goodman. El mismo expresa que no existe mayor relación entre ambos autores, salvo el tema que le atañe: ambos consideran la noción de complejidad, desde distintos ángulos. Idea que el artículo entiende como multiplicación de los términos que conforman la estructura del lenguaje.
En el texto, presenta el modelo de Leibniz de descomposición de un número en factores primos. Así descomponer en partes simples se convierte en punto de partida de nuevas combinaciones simbólicas, de mayor complejidad. De Goodman recoge su idea de que nuestro entendimiento acoge todo aquello que pueda representarse mediante símbolos. En su tesis, construye una vía de ida y de vuelta que permite, no sólo una mayor “soltura operativa”, sino que diluye la distinción entre complejidad y simplicidad, además "este vínculo se enriquece pues ambas conforman aspectos de una configuración teórica indisoluble".
“Intentaremos, a partir de estas premisas, mostrar que la doctrina del factor invariante se encarna en el cálculo de todas las figuraciones posibles del universo. Aquí figuración significa proyección del número en el espacio. Este aspecto numérico del concepto admite, pensamos, una vertiente puramente simbólica, la cual tomaremos en cuenta. El siguiente paso consiste en mostrar que cualquier ente puede ser considerado factor invariante y convertirse en centro del mundo. Si cada punto del espacio teórico puede ser visto como centro de un sistema, es posible concebir un sistema de complejidad infinita”.

Esto es, no quedarse en un esquema irreductible. Elaborar, a partir de sus componentes. Desprender en un orden. En un lenguaje más propio, diría que es evitar que el tema se agote.
Este artículo, teórico, es la base para un sistema, con resultados constructivos. Por eso parece interesante, o productivo.
Lleva a pensar, volviendo a lo político, que la gente en el siglo XIX se interesó por escritos basados en doctrinas sociales. Marx y Engels, por ejemplo, y su densidad. Cercana al hecho, nada de fútil. Constatando la necesidad, de un modo útil.
Su densidad había logrado entusiasmar a los sectores populares.
Lo que se ha llamado luego comunismo científico son capas cada vez más difíciles de leer, y lo que a la gente le llama la atención es el orden que se conforma. Lo que se logra con aquello en la praxis. Su manifestación, repercusión.
Que puede verse aplicado en la sociedad real. Eso interesa. Lo real, un vehículo para actuar ante la desigualdad. Las injusticias sociales. De hecho, gran parte del público no necesita llegar a esas capas. Como montañas no abordadas, habitan los valles.
Hemos llegado a un punto en que las cosas no se hacen, y tal vez resultan interesantes los vehículos para hacer.

Me parece interesante, con respecto a la Escuela, que hay un concepto de espiritualidad, que Marx no aborda, y Iommi sí. Si entendemos espiritualidad por interioridad la poesía también es espiritual. Tema tal vez para un próximo artículo, en específico.

Qué pasa que es la primavera cuándo es otoño,
A qué se debe esta luz cálida interior
Paraguas van cabizbajos y su ansiedad no me llega
Soy inmune a vientos de muerte
Si elijo volver a ese camino
La vida se va pausadamente
Entre los campos de trigo
Y no de esta forma
De esperas inclementes
Los ventanales que se abren en tormentas
Piden piedad por sus pobres personajes
Piden piedad por sus finales
De escritores alucinados
En el último café, en el último estertor, en lo último
En un London veloz, en un Pollock que se va
En un Trakl de campos sombríos

En el invierno Persephone
Tiene que regresar al inframundo
Es un ciclo, es solo un ciclo - repito
Hay una segunda vez, hay un viento nuevo
Un sol en la ventana
Hamlet lo ve por última vez
¿es el último? ¿hay otro? ¿es el último?

Aspecto astronómico de la Nueva Biblioteca de Alejandría
Al dibujar la Nueva Biblioteca de Alejandría, o Biblioteca Alexandrina (1996), de la firma Snøhetta, me llamó la atención su aspecto externo astronómico, y su aspecto interno de anfiteatro, más de mesón que de estantería (horizontal más que vertical), en sus vistas interiores.
Frente al Mediterráneo, conmemora la antigua Biblioteca destruida en la Antigüedad, procurando reavivar su atmósfera de acopio de conocimiento. Para ejecutar el proyecto se unen aportes de países europeos, americanos y árabes, más el gobierno de Egipto, y la Unesco. Las obras empiezan en mayo de 1995 y concluyen en diciembre de 1996. El 16 de octubre de 2002, la Nueva Biblioteca de Alejandría es inaugurada, acudiendo importantes jefes de Estado.
El edificio, emplazado cerca del lugar donde se supone se encontraba el antiguo, es un gran cilindro de cemento, cristal y granito, con bajorrelieves escritos, en la mayoría de los idiomas del mundo. Tiene una superficie de 36.770 m2, y una altura de 33 metros, en once niveles, de los cuales cuatro son subterráneos. Posee una sala hipóstila, evocando la arquitectura egipcia, sostenida por columnas de hormigón y madera noble, como sala de lectura, con capacidad para 2000 personas. La cubierta es circular, en cita a Ra, dios del Sol. El vidrio y aluminio son cernideros de la luz, en forma diagonal, mientras que por fuera el cuerpo se refleja hacia el Mediterráneo, como recuerdo del Faro de Alejandría.
Tiene un aspecto geométrico, frecuente en los proyectos de los años 90. De hecho, me recordó a mi proyecto de título, con su horizontal en talud, y a las obras que buscaba como referentes, de cuerpos geométricos que interactúan, como el plegado que el cilindro tiene contiguo.

Concepto de membrana y reticulado en Amereida
Buscando la praxis de cálculo de la Escuela de Arquitectura de la UCV, me ha llamado la atención el uso frecuente de cerchas y vigas reticuladas en sus proyectos de arquitectura, concepto nada inusual, reconocible. Es un buen ejemplo de complejidad en elementos solidarios, y de reconocer el triángulo como figura indeformable. En lo orgánico de sus formas, su crecimiento parece ser aditivo. Y estos triángulos básicos, indeformables, pueden ser su módulo: varias de sus obras tienen este recurso. Como también la aplicación de la tracción: el esfuerzo que estira, especialmente útil para materiales livianos y baratos, como los que emplea la Escuela.
Procuré hacer luego un croquis personal de “La Casa de Los Nombres” (abajo, boceto), obra construida en 1992, en la localidad de Ritoque, Chile, desmontada ese mismo año (no es la idea que permanezca). Parece de especial interés la relación que se da entre los autores, y su método de enseñanza, donde participan en la construcción los alumnos.

Autores: Fabio Cruz (Arquitecto), Salvador Zahr (Arquitecto), Boris Ivelic (Arquitecto), Ricardo Lang (Diseñador).
Constructores: Talleres de Arquitectura de 1°, 3°, 5° Año, y Talleres de Diseño de Objetos, Escuela de Arquitectura UCV, Chile.
Año: 1992 (obra desmontada)
Ubicación: Ciudad Abierta de Ritoque.

El requerimiento es albergar al total de la Escuela (400 personas), con objeto de exponer el quehacer de sus talleres, y conmemorar los cuarenta años de su refundación (1952). El "acto" principal luego es “habitar el espesor de las arenas, alcanzadas con el paso difícil y la luz cruda”, destacándose dos conceptos claves: Lugar y Acto. Así, aunque la obra comienza definiéndose desde el Acto, es el Lugar el que condiciona todos sus fundamentos.
Desmontada, la casa de los nombres perdura en la memoria de su acto, en las planimetrías, y en los registros fotográficos. En su negativo, o vaciado. Puede hacerse la asociación con la poesía de Iommi: la arena es la página vacía.
Queda el vestigio de los pilares de hormigón pretensado, como bosque en la duna, y el vacío excavado, como expresión del interior que se puede albergar bajo el viento.

Conclusiones
Al leer en forma somera, la tesis de la UCV tal vez parte de una premisa aparentemente errada: “quien conozca las partes, conocerá la cosa”. Lo que le nace a uno es pensar que quien conoce la parte no conoce la cosa, a no ser que exista una continuidad unificadora, un relato base. Una poética, que es la parte con comprensión de la cosa completa. Entendiendo sin embargo la idea de complejidad infinita, si cada punto del espacio teórico puede ser visto como centro del sistema, el concepto es la premisa certera de que todos somos un centro, mendigo y rey, como dice uno de sus versos. La aparente disgregación luego tiene relato, y es un relato interesante.
Los dos proyectos dibujados en este texto se contraponen: uno con materiales permanentes, nobles, y el otro con materiales baratos, pero el segundo en el descubrimiento de módulos indeformables, que se van articulando. Recursos constructivos. Uno de los legados más notables de la Ciudad Abierta de Ritoque, y la Escuela de Arquitectura de la UCV: una idea de estructura íntimamente ligada al sentido de la arquitectura.

Monday, February 19, 2024

Planificación y equidad

Los proyectos de gran escala son significativos, transforman la fisonomía, cambian el paisaje. Las fotos contemporáneas de Santiago, por ejemplo, aparecen con nuevos hitos, que hace algunos años no existían, y un dibujante o pintor no podría obviarlo. Cada día los países árabes petroleros producen récords, récords modernos, en cuanto a altura, tamaño y tecnología de construcciones, que obligan al relato, y a los registros, a actualizarse, permanentemente.
Tema de escala y proyecto significativo, que hace pensar en arquitectos como Rem Koolhaas, o Peter Cook (Archigram, en los 60), y sus intervenciones urbanas, visualizando aquel tipo de autor al que se le ubica como “contrastante” o incluso “anti contexto”. Una morfología innovadora, que al ser de carácter original hace pensar, trae una imaginería. Es otro pensamiento, una materia crítica densa aplicada.
Por otro lado, subsisten ciudades paralelas, en un tema social de necesaria inclusión.
Chile actualmente tiene el edificio más alto de Sudamérica, ¿lo sabe la mayoría o les es relevante? Dadas las condiciones actuales del mercado, ¿no podría estar en Argentina, o Brasil?. La Gran Torre Costanera (2014), de la firma Pelli Clarke Architects (arriba, croquis propio), tiene 62 pisos y 300 metros de altura, siendo hasta la fecha, 2024, el rascacielos más alto de Sudamérica y, al momento de inaugurado, el más alto de Latinoamérica. Desde 2020, sin embargo, es el segundo, después de la Torre Obispado, en México, Monterrey (abajo). Hito de Sudamérica, más allá de una empatía, o si produce afecto, o cierto orgullo. Y, ciertamente, modifica el paisaje, dejando al distrito financiero de Santiago, en situación secundaria. Nótese la fisonomía piramidal de la Torre de la Industria, más reducida, de cómo la conoció uno, como estudiante. Al respecto, pensando en esta constante movilidad, este último edificio, con sus 110 metros, fue el más alto de Chile entre 1994 y 1996, cuando lo supera la torre CTC. Nótese las proporciones (primera imagen).
Innovar o administrar. Proyectar o consolidar. Pero consolidar qué. La pregunta planteada así lleva tal vez demasiado pronto a lo conservador o liberal. Tal vez no es tan así. No es tan obvio.
Generalmente el planificador aprovecha oportunidades, una voluntad de gestión, que puede ser construida. Y la misma realidad hace que los proyectos generalmente sean más bastos o toscos de lo que queramos, sobre todo en el aspecto social.

Planificación y continuidad
Me hice la pregunta al pensar en el Plan Nueva Alameda. Y no quise hacer la crítica sin pensar en aspectos positivos, en alternativas. Cuál es nuestro plan. Cuál es nuestra idea de sociedad. Qué queremos hacer con la ciudad, qué consideramos una capital. Qué consideramos común, o compartido.
La constructibilidad de las ideas que tenemos requiere una “administrabilidad” de la situación, un rango de maniobras, una gobernabilidad, que haga posible el desarrollo de las obras. Un apoyo, por último, que puede verse respaldado por votaciones, más o menos regulares, más o menos cíclicas. Eso es el trabajo político, que sirve para impulsar determinada obra.

Qué es lo que se está soñando. A dónde van las políticas urbanas, muchas veces bajo el impulso de políticas ideológicas. El presente pensamiento, tal vez se inscribe en el llamado actual que hacen algunos a los gobiernos y administraciones de evitar cierta “volatilidad”. Llamaría a una búsqueda de la densidad en las organizaciones sociales, y en las colectividades llamadas de izquierda, y centroizquierda, que lleve a la construcción, más que a la empecinada fiscalización de lo que produce la derecha. Que es lo que se ha estado hasta ahora, y se ha criticado.

Línea de tiempo de la planificación urbana
Visualizando una línea de tiempo de la planificación urbana en Chile, bastante basta, para poder trazarla rápido, aparecen algunos hitos. El Tratado de Tordesillas (1494), Pedro de Valdivia (1541), Benjamín Vicuña Mackenna (1872), Karl Brunner (1933), Juan Honold, Pastor Correa, y Jorge Martínez (1950), Juan Parrochia (1960), y Miguel Lawner-CORMU (1970-1973).
Dentro del cerrado ámbito de la planificación en Chile, de su elitismo, y su falta de conexión con las capas populares, que aquello de todas formas el presente artículo procura dejarlo claro en un encabezado, tal vez de todas formas es bueno fijarse en personalidades. Y estudiarlas, respetando aportes y etapas significativas, y los impulsos y voluntades que han significado avances.
Desde el Tratado de Tordesillas, que divide el mundo en dos entre España y Portugal, y constituye tal vez la primera “línea” europea sobre el continente (1494), dejando esta parte del territorio con idioma español, se han aplicado lineamientos y trazados, desde lo político administrativo, y desde las necesidades sociales.
Tal vez el primer planificador fue Pedro de Valdivia. Fundó las ciudades más antiguas de Chile, incluyendo la capital, Santiago del Nuevo Extremo (1541), La Serena (1544), Concepción (1550), Valdivia (1552) y La Imperial (1552). La vida urbana comienza así con su impulso, y la fundación de Santiago, el 12 de febrero de 1541, como asentamiento defensivo, entre los brazos del río Mapocho, y protegido por el cerro Huelén (renombrado Santa Lucía, en honor a Santa Lucía de Siracusa), desde cuya cima se tenía una amplia vista para prever movimientos.
https://www.memoriachilena.gob.cl/602/w3-article-808.html
Benjamín Vicuña Mackenna (1831-1886), abogado e intendente de Santiago, se destacó por múltiples obras urbanas. Entre las más importantes está el Paseo del Cerro Santa Lucía (ex Huelén), la canalización del río Mapocho y, la que interesa más en el presente texto, el Camino de Cintura.
La Avenida Vicuña Mackenna (el ex-Camino de Cintura) actualmente lleva su nombre, y la gente la conoce como la larga avenida que une Puente Alto con Santiago-Providencia, pero no tanto el dato de que iba a ser un primer límite y, en determinados momentos, un anillo, o circunvalación. Durante la República Liberal (1861-1891), siendo intendente, se ejecuta la “gran remodelación urbana de Santiago”, que incluía la construcción de un borde perimetral que, sin embargo, no tenía fines tan equitativos: separaba la ciudad “propia i cristiana”, de la ciudad “bárbara”, de los pobres. El “Camino de Cintura” así rodeaba el actual centro: las actuales Matucana y Exposición por el poniente, Av. Matta y Blanco Encalada por el sur, Av. Vicuña Mackenna por el oriente, y Mapocho por el norte. Alrededor, fincas agrícolas y grandes extensiones de árboles, con el propósito de contener enfermedades e infecciones, que se originaban, como mentalidad de la época, en el mundo popular. A la vez, la Alameda se consolida como eje central, y paseo para las familias acomodadas.
Arriba: Límite urbano Santiago en 1872 y en 1873, según la Revista ARQ (Santiago) N°109 (Ediciones de la PUCCh). En azul, se grafica el límite en 1872, según un informe de Marcial Plaza, encargado por Vicuña Mackenna. Al sur, el Zanjón de la Aguada, y al poniente el ferrocarril y la Quinta Normal. Al norte y al oriente, límites más difusos. En rojo, se traza el límite urbano según la Ley de 1873. En gran parte, queda definido por el Camino de Cintura. Al norte y al poniente los límites quedan sin definir, por la misma falta en esos tramos del borde propuesto.
El urbanismo nos lleva a una experiencia entrecortada, o a la experiencia continua, y nos parece que la experiencia continua puede ser mejor. Todo lo que unifique la ciudad con un hito, posiblemente dignificando tanto deterioro como consolidación, reviste interés.
Link:
https://www.scielo.cl/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S0717-69962021000300151

Karl Brunner, autor del Barrio Cívico de Santiago (1887 - 1960) fue un ingeniero, arquitecto, y urbanista austríaco, titulado en la Technischen Hochschule de Viena, que realizó varias intervenciones urbanas en Chile, y en Colombia.
De 1929 a 1932, trabajó en el Ministerio de Obras Públicas, en la Sección de Urbanismo dirigida por el arquitecto José Luis Mosquera. A la vez, fue profesor de la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile (1930-1932), donde divulga los principios del urbanismo moderno, incorporando recursos como zonificación, y fotografía aérea.
Se encarga, asimismo, del estudio de ensanche de Santiago, donde aparecen primeros tramos de un anillo intermedio, idea que siempre ha rondado en los planificadores. Brunner clasifica y prioriza vías para modernizar Santiago, previendo que alcanzaría un millón de habitantes hacia 1960.
Planifica reforzar el área consolidada, y propone una articulación periférica. Proyecta esbozos del Arco Dorsal en el norte, une caminos zigzagueantes en el poniente y sur, y da jerarquía a Avenida Pedro de Valdivia, en el oriente.
El Barrio Cívico, nace en 1930 (abajo, croquis propio), proponiendo nuevos espacios en torno al Palacio de La Moneda, vaciando las cuadras que enfrentan el edificio, por el norte y el sur, y generando plazas, que lo dotan de dignidad y renovación. El proyecto se extendió hacia el sur a través de un eje en cuyo remate se ubicaría el Congreso Nacional, que no llega a construirse.
https://www.enterreno.com/moments/barrio-civico-de-santiago-en-el-ano-1941
Luego de esta estructuración central, la Circunvalación Américo Vespucio nace hacia 1950, en la Facultad de Arquitectura de la Universidad de Chile, con Juan Honold, Pastor Correa y Jorge Martínez Campos, como respuesta a conectar sectores periféricos sin pasar por el centro. Ésta, comienza a construirse en 1962, y termina en 1987, al unirse el oriente con el norte en la Cuesta de la Pirámide, con una longitud total de 69 km.
https://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2013/08/10/avo-una-autopista-fraccionada/

En los años 30 ocurren cambios sociales que transforman la ciudad, producto de migraciones rurales. En los 40, Santiago tiene un fuerte crecimiento, marcado por la diversidad de servicios, y el aumento de población en los bordes, mientras la del centro decrece, convirtiéndose paulatinamente en polo administrativo y comercial.
El crecimiento de la periferia afecta a la segregación, ya que se dota de infraestructura a pocos, mientras otros sufren problemas de traslado. También el aumento vehicular, con insuficiencia de capacidad vial, afectando la calidad del aire, y tiempo de viaje.
Por eso, su propósito es la conexión, uniendo 19 comunas de las 35 de Santiago, como uno de los ejes más importantes. Por otra parte, la extensión ha sido tal que ya no es límite, sino parte de la ciudad, sufriendo una serie de cambios, al ser convertida en autopista, subdividida en tramos.
Al recorrerla, es posible constatar diferencias sociales, y distintos paisajes urbanos. Habitación, equipamientos, parques, comercio. En algunas zonas, cumple rol de soporte de desarrollos viales, a la vez que es agresivo con algunos barrios, y genera un límite para los transeúntes, siendo notorio que los sectores en que la autopista es agresiva corresponden a zonas pobres. Por el contrario, los tramos en donde se integra, con áreas verdes, corresponden a zonas acomodadas. Esto, muestra una clara inequidad de políticas urbanas, que perjudica y castiga a los habitantes de las zonas más postergadas. Vespucio, como vía estructurante, ha sido modificada en el tiempo, pasando de ser límite a parte activa. Su fisonomía de circunvalación une identidades, y participa del desarrollo vial de Santiago.
A Juan Parrochia (1930-2016), planificador del tiempo de Eduardo Frei Montalva, independiente de su posterior conexión con el régimen militar, se le debe el liderazgo en la planeación del Metro de Santiago.
En 1957, ingresa al Departamento de Estudios del MOP, que proyectaba el nuevo Plan Intercomunal. Ingresa como arquitecto y urbanista, y a partir de 1960 pasa a ser jefe del plan. Como tal, lo presenta al Ejecutivo, y es aprobado. Durante los diecisiete años siguientes, dirige proyectos que cambian la fisonomía del país. Junto a otros profesionales, fue parte de la construcción del aeropuerto Pudahuel, y de la avenida Norte-Sur, entre otras obras. Tras el terremoto de 1960, participa en la reconstrucción de Valdivia y Concepción.
A poco de asumir Frei Montalva, se cuenta que le solicitó estudiara una solución para el transporte, caracterizado por congestión e insuficiencia de locomoción. Juan Parrochia, según él mismo ha relatado, responde: “Con mucho gusto, Presidente, pero no la voy a estudiar. La voy a construir”.
En 1964, es nombrado secretario técnico de la Comisión Metropolitana de Tránsito Rápido, para proyectar soluciones acordes con este Plan Intercomunal.
La obra por la que se le recuerda más, proyectada en 1968, y terminada en 1975, es el planeamiento y construcción del Metro de Santiago. A tal punto, que sus estudios aún cobran relevancia en las actuales líneas. Como preveía, no solo se requiere infraestructura, sino interconectividad: que los lugares donde transitan tanto buses como Metro estén conectados. De esta idea surge el Metro como una de las principales arterias, integrada al sistema de buses, y al tránsito de personas. Promueve un crecimiento de la ciudad, considerando ciudades satélites con distintas funciones, de relativa autonomía.
Sin embargo, esta visión sustentable es desbaratada ya más entrada la dictadura de Pinochet, al instaurarse en 1979 una política nacional de desarrollo urbano, más mercantilista, depredadora, que retrocede en los avances alcanzados. Modelo que, sin embargo, no fue cambiado, sino profundizado en los 90 con autopistas urbanas, que fueron desplazando cada vez más el sistema diseñado por Parrochia, que buscaba equilibrio entre transporte público y privado.
Con respecto al proyecto de Metro, en julio de 1975 se realizó la inauguración técnica de la Línea 1, y el 15 de septiembre se abrió al público entre las estaciones San Pablo y La Moneda. Dos meses después, Parrochia, primer Presidente del Metro, renuncia, para dedicarse a la docencia.
http://www.quepasa.cl/articulo/actualidad/2016/02/el-hombre-que-construyo-un-metro.shtml/

Como dato curioso, Allende al asumir quería sacarlo. En su campaña presidencial, Salvador Allende hacía notar el gasto público que significaba el proyecto y, después de asumir, sacó a Juan Parrochia, y nombró en la dirección de la obra al ingeniero Eduardo Paredes. Pero era tal el respeto que inspiraba Parrochia que, un día antes del anuncio, el propio Paredes fue a verlo a su casa, ofreciéndole quedarse en una oficina de Vialidad Urbana, como cuenta su familia.
Allende comprende que el metro puede ser un sello de su gobierno, sobre todo de uno de inspiración popular, que priorice obras para la clase obrera, y así durante la Unidad Popular el proyecto sigue adelante, aunque con retrasos por los acontecimientos políticos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Juan_Parrochia
https://www.latercera.com/nacional/noticia/primer-borrador-del-metro/374677/
La Unidad Popular y la experiencia colaborativa del edificio de la UNCTAD
Miguel Lawner (1928), arquitecto, fue durante la Unidad Popular nombrado por Allende director ejecutivo de la Corporación de Mejoramiento Urbano, CORMU, donde su enfoque fue la integración social. Bajo su dirección, se realizaron 158 mil viviendas económicas, y la remodelación del Parque O´Higgins, entre otros proyectos. También ejerció como coordinador de la planificación del edificio de la UNCTAD III, símbolo de colaboración entre arquitectura, arte y diseño dentro de la “vía chilena al socialismo”. Un interesante edificio, que algunos inscriben en el brutalismo, con reminiscencias de constructivismo y expresionismo.
“Tuve la fortuna de que el año en que ingresé, en 1946, se puso en función un nuevo plan de estudios, la llamada ‘reforma del año 46’, que acabó con la concepción clásica de las escuelas de arquitectura que existían en el mundo, basadas en las escuelas de Bellas Artes de París, completamente ajenas a la realidad chilena. En consecuencia, tuve una formación muy vinculada a la sociedad en que estábamos inscritos. Me tocó vivir un tiempo de concepciones muy progresistas post Segunda Guerra Mundial. Flotaba en la humanidad entera un aire progresista con un acento muy fundamental en lo social, después de la pesadilla que significó el triunfo del nazismo. Ese magnífico plan de estudio estuvo influido por un profesor húngaro que llegó a Chile como refugiado y que había estudiado en la escuela de la Bauhaus. Esa concepción social en el ejercicio de mi profesión me ha acompañado toda la vida”, resume.
Fue así director de la CORMU durante todo el gobierno de la Unidad Popular, hasta el Golpe de Estado de 1973, de Augusto Pinochet. De la arquitectura oficial, a ser prisionero político.
https://doble-espacio.uchile.cl/2023/07/24/unctad-iii-el-legado-arquitectonico-y-cultural-de-la-unidad-popular/
https://www.santiagoadicto.cl/2018/11/26/275-dias/

En 1971, en 275 días, arquitectos, ingenieros, artistas y obreros, levantan el edificio de la UNCTAD III, para la sede de una conferencia de la ONU, que hoy es el Centro Cultural Gabriela Mistral (arriba, boceto propio). Se usó por primera vez la computación, y hubo constante convivencia con sectores populares, incluyendo un asado en Alameda, con Salvador Allende.
El diseño fue de José Covacevic, Hugo Gaggero, Juan Echenique, José Medina y Sergio González, y la construcción bajo coordinación de la CORMU. Además, el edificio integró arte al nivel de la ocasión, por parte del pintor Eduardo Martínez Bonati. Como curador, incorpora obras de Roser Bru, Gracia Barros, Luz Donoso, Guillermo Núñez, José Balmes, Mario Irarrázaval, Mario Toral, Samuel Román. Él mismo gestiona el pago, equitativo. “Fue el salario equivalente al de un obrero de terminación de primera”, recuerda Martínez.
La escala y tiempo de construcción es inédita. “El proyecto contempló dos edificios, la placa y una torre. La placa, de 24.000 m2, consistió en un pabellón de dos pisos de 170 metros de largo. En el nivel principal se ubicaron dos salas de conferencias con capacidad para 350 personas cada una, y una sala plenaria con capacidad de 2.300 personas. El nivel del ingreso se destinó a salas de reuniones y conferencias adicionales, y al salón de delegados. Los servicios de comunicación, una cafetería, y un restaurante autoservicio con capacidad para 600 personas, se localizaron en el zócalo”, explica Lawner, intermediario entre Allende y los profesionales. “La torre consideró un programa de 400 oficinas distribuidas en 20 pisos, con una superficie total de 15.000 m2 y 70 metros de altura, incluyendo un helipuerto. Ambos edificios estaban conectados entre sí mediante puentes y comunicados con el entorno urbano a través de túneles que vincularían con calles adyacentes, una estación de metro y el Parque Forestal”.
Se erigen 16 pilares, para sostener la cubierta del edificio, de 9.000 m2, permitiendo construir el resto simultáneamente. Se usan mayoritariamente materiales nacionales, reduciéndose a solo diez por ciento los importados. Y, por primera vez, la coordinación de un proyecto se realiza íntegramente con el uso de informática, lo que aceleró las obras. “La construcción se llevó a cabo en tres turnos, que funcionaban siete días a la semana. Allende visitaba la obra prácticamente a diario para alentar a los más de tres mil trabajadores”, dice Lawner.

Cronología de cambios de nombres y uso del edificio UNCTAD
En 1973, ocurrió el Golpe de Estado, y el edificio UNCTAD pasó a llamarse Diego Portales, siendo sede del gobierno de Pinochet hasta 1981, debido a la destrucción de La Moneda, que significó su bombardeo. Cae en progresivo deterioro, incluyendo un incendio en 2006, hasta que actualmente, remodelado, alberga el Centro Cultural Gabriela Mistral, GAM.

Cronología:
UNCTAD 1971-1973
Edificio Diego Portales 1973-2009 (hasta 1981 fue sede de gobierno)
GAM 2010-2024
Es posible hacer el ejercicio de graficar los periodos del edificio, en un diagrama circular, para constatar cuánto pesa la memoria de Pinochet en algunas generaciones de chilenos. Ha pasado bastante tiempo, y sigue siendo más Pinochet proporcionalmente, en cuanto a tiempo, en la ocupación de los lugares.
1973-1981 edificio como sede de gobierno
1981-1988 conferencias
1988-2010 sombra (incendio de 2006)
2010-2024 transformación

– “Es caprichoso, es frío. No entiende el negocio”. – Kendall sobre Matsson (que al final resulta ser el ganador, el que se queda con la empresa, en el final, algo trágico, de “Succession”)
Plan Nueva Alameda
Este artículo termina con una vista y crítica del actual Plan Nueva Alameda.
Se percibe, como ya he opinado antes, como un minimizar las demandas que dieron origen al estallido social, de 2019. Recordando, Piñera ganó a Lavín evadiéndolo. Hay casos exitosos de política que esquiva, o sortea, sin decirlo en forma peyorativa. La gente dice “hacer el loco”, en los casos en que se evade lo conflictivo. A veces resulta, como recurso. Como escribía al inicio, nos adaptamos a la fuerza, sea bendita o maldita. Nos adaptamos a la infraestructura.
En mi caso me gustaría algo más frontal. Y el proyecto en cuestión tiene aspectos no aceptados por todo el espectro político, como en la imagen inferior, donde Eduardo Artés reclama por la ausencia de “Jardín de la Resistencia”, dando claramente a la propuesta oficial un cariz político, algo más cercano a la derecha. Cuando los bandos políticos, además, se empiezan a pelear de quién es la propuesta, hay un problema, de originalidad al menos.
Como antecedente, en diciembre de 2022, el Presidente Gabriel Boric, el gobernador Claudio Orrego, y los municipios de Lo Prado, Estación Central, Santiago y Providencia, firman el convenio que permite la transformación del eje Alameda. Son cuatro obras principales: una ciclovía metropolitana, de 24 kilómetros, la remodelación del “Nudo Pajaritos”, y de la Plaza Italia, y por último el proyecto de recuperación del espacio público, que incluye el mejoramiento de fachadas en torno a la Alameda, la ampliación de áreas verdes, y la implementación de cámaras de seguridad. Está basado, sin embargo, en un proyecto del tiempo de la administración Bachelet, previo al estallido social, vale decir, como si no hubiera ocurrido el evento. Asimismo, con posterioridad se había descartado, como poco viable. De forma poco humilde, Orrego la ha llamado “la remodelación más importante de los últimos 50 años”. Claro, está su nombre. Se desearía, como he leído en varios artículos, más participación ciudadana.
Parece ser el remozamiento de un proyecto “para otro tiempo”. Además, “no pasa por todas partes”. Tal vez un proyecto más “integral” sería más “socialista”. Una circunvalación. O, tal vez en el mismo eje, considerar “nodos”, o puntos de articulación con la metrópolis. Pensar transversalidad, no solo axialidad.
https://www.latercera.com/la-tercera-sabado/noticia/la-remodelacion-de-la-alameda-siete-miradas-de-expertos/45TMYOS3W5BUJDOEHIDW4U7H7E/
https://nuevaalameda.cl/navega

Esa capa de pintura, que se ha presentado como proyecto urbano, además, inquieta un poco. La entiendo, pero no la asimilo como de importancia. Claramente no es Vicuña Mackenna ni Juan Parrochia. Es algo que se va a perder, y va a quedar una “obra gruesa”, una infraestructura, con la que siempre hay que trabajar. Va a quedar la tarea pendiente.
La tarea pendiente de unir la ciudad. De propiciar equidad, como principio. Rebatir la idea, equivocada a juicio del presente artículo, de que la equidad no es importante. Dentro de esta “beligerancia”, ideológica, tal vez no tan negativa, sin embargo, puede darse la capacidad de mover infraestructura “no irritable”. Nadie molesta a Elon Musk porque quiere viajar a Marte, porque es un proyecto no irritante, que no molesta, es innovador. La capacidad de mover una “novedad”, que congregue. Si Elon Musk quisiera modificar un centro urbano, el centro de París, tal vez sería irritante, problemático. De hecho lo es, al intervenir en organizaciones de trabajadores.
https://lacasadejuana.cl/la-ciudad-y-los-concursos/

Queda subyacente, al pensar en lo mejor para la ciudad, aplicar una idea equitativa, real. El ejercicio de algo más radical. Se me ocurre un sistema de anillos concéntricos. Uniendo anillos a través de transversales, tipo Vicuña Mackenna. Una idea que tracé en un curso de la universidad. Con la que aprobé bien, generando ciertos comentarios.
La capital así podría estar conformada por anillos, que reduzcan la presión sobre Américo Vespucio, y radiales, que disminuyan el impacto sobre las vías y carreteras de acceso.

Es interesante leer opiniones, como las de los links anteriores. Andrea Ortega, académica de la Universidad Católica, destaca la implementación de la ciclovía, pero cree que “falta énfasis en la recuperación y puesta en valor participativa del patrimonio urbano en todo el eje y particularmente en la Zona Cero. La recuperación del espacio público no puede estar enfocada solo en el mejoramiento de fachadas”. Destaca que es necesario discutir la metodología en la que participará la ciudadanía: “¿La recuperación del espacio público para quiénes? ¿Cuáles serán las partes interesadas consideradas en el proceso? Es necesario tener en cuenta que los conflictos en este eje de la capital no serán resueltos sólo volviendo a pintar una y otra vez las fachadas”.

Conclusiones: Gobernabilidad y proyección de ideas, reivindicación de la equidad
Cuando no se quiere modificar la sociedad aparecen capas de pintura, que en un tiempo más un manifestante va a rayar. Alguien debería decir, a quienes redactan los textos, sobre priorizar ideas, en los mismos proyectos.

Le mostró una carta a medio llenar
Algo faltaba, estaba adulterado
Alguien le había mentido
Algo no estaba bien y se supo en peligro

Viendo aspectos positivos, se puede hablar de un proyecto más bien moldeable, que puede ser factible de cambios. Es flexible, puede adaptarse. Por otra parte, la remodelación y unificación de los sectores señalados, se percibe como necesaria. Ahora, de nuevo como crítica, puede entenderse en un tiempo de satanización de lo confrontacional, o controversial. Algo frontal, en lugar de todo este trabajo de tejido y ajuste, y toda esta cosa psicológica, que favorece consensos, en lugar de ideas, cierta pereza de ideas, en suma. Radicalizar permite tomas de opiniones más libres. Radicalizar sirve para clarificar. En arte y cultura obras con ideas comprometidas, y no exclusión. Un sentido de solidaridad y, como título del presente texto, la palabra equidad.
Continuidad, proyección, legado
A dónde va este gobierno de jóvenes, que tiene aspectos positivos, como problemáticos, producto del aprendizaje. Como gran crítica, no tiene una sucesión clara, y puede caer en el mismo error de prácticas criticadas: más que ideas y principios comunes, como aporte, traer solo personas.
Desde el innovador, pero desigual liberalismo, del tiempo de Vicuña Mackenna, en el siglo XIX, muchos chilenos alcanzaron a ver una búsqueda de bienestar estatal en el siglo XX, desde la república socialista de Marmaduke Grove, a los gobiernos de Pedro Aguirre Cerda, y Allende. Luego, la dictadura militar y el aire enrarecido posterior. Con sus errores, el aporte del siglo XX es aplicar sistema.
En los croquis elegidos, en el presente artículo, procuré detenerme un tiempo en tres ejemplos, con dos extremos icónicos. De una gestión cooperativa, en 1971, del edificio de la UNCTAD, a la arquitectura de gran escala, de carácter corporativo, empresarial, de 2014: la Gran Torre Costanera. Y el Barrio Cívico de 1930, como centro de la ciudad. De Vicuña Mackenna, me llamó la atención su halo de liberalismo, respondiendo a la época, un tanto clasista. Su buena previsión técnica, e intuición correcta, sin embargo: la avenida circundante. Y los proyectos controversiales y radicales del siglo XX, y comienzos del XXI. Recuerdo reuniones de taller de arquitectura en las que hablábamos, en un círculo, en grupo, y de repente llegaba alguien atrasado. Mi curiosidad era si el alumno iba a ser deficiente, o admirable. Y mi alegría cuando era admirable, a tal punto que influía y comenzaba a modificar la conversación. Eso significa que alguien nuevo siempre puede proponer algo fuerte. Un proyecto de arquitectura así puede hablar bastante de urbanismo.
Este posteo iba a ser crítico, pero de alguna forma se transformó, en parte, en un estudio. A propósito de la puesta en marcha del Plan descrito, me interesó este tema, que quise abordar en este posteo rápido. En el próximo volveré a mis proyectos.
Arriba y abajo: bocetos propios de proyectos de escala urbana en Santiago (febrero de 2024).

Saturday, December 30, 2023

Éntasis o sentido de proporción

Generalmente no se diseña para espacios inaccesibles a la vista, sino que son para presentar, contemplar. La existencia actual de drones amplía la posibilidad de vistas a las aéreas, pero siempre se favorece al transeúnte, a la persona a pie. Las cosas en arquitectura son para ver, se favorece su apreciación. Arriba: croquis propio de la Acrópolis de Atenas, que favorece la perspectiva simultánea de cada edificio. Nótese que la disposición de las construcciones produce distintos focos.
https://es.wikipedia.org/wiki/Acropolis_de_Atenas
https://thatsmaths.com/2018/06/21/optical-refinements-at-the-parthenon/
En principio, el emplazamiento no parece programado. Sin embargo, se ha observado una disposición peculiar de los tres edificios principales: el edificio de entrada, o Propileos, el Partenón, y el Erecteión. Un sistema de rayos de vistas emanan desde el Propileos, entregando una visión óptima del Partenón. Desde este punto, los límites más externos, de los otros dos hitos, forman un ángulo de 60 grados, y los tres puntos un triángulo equilátero (abajo), forma asociada con Atenea.
Esto lleva a pensar en la apreciación de los edificios y monumentos en la antigua Grecia, donde las construcciones se modificaban, a través de la llamada éntasis. Un ensanche, para mejor apreciación, rasgo que puede considerarse una cima del conocimiento geométrico: que la persona domine la geometría, no que la geometría domine a la persona. Error tan típico de estudiante, o de arquitecto en aprendizaje: ser “dominado”, constreñido. Qué bello entonces aparece el pensamiento griego, precursor del humanismo, que lleva a la naturalidad: no ve extrañas las ideas, las vuelve cotidianas, lo que lleva a la vez a una preocupación social, política. Vale decir, a que las ideas se vuelvan cotidianas, se encarnen. Que estén “a sus anchas”, plenamente. Lo que no es menor, porque coincide con periodos históricos de auge, en las civilizaciones. Aquello, en lugar de quedar atrapado en un formalismo, constreñido en un círculo, o en un cuadrado rígido. Contemplación, y sentido de la orientación, lo que buscaban priorizar.
Éntasis
Pienso la éntasis como la adaptación a la apreciación humana. En cuanto a arquitectura, es el recurso que contrarresta una ilusión óptica: la tendencia a ver líneas cóncavas (“hebilla”). Si bien es cierto que los griegos lo vuelven célebre, en el Partenón, también lo utilizan pueblos como el egipcio, los chinos, y los incas.
Curvar columnas, o soportes, ensanchándolos, genera así percepción de rectitud. Tal vez su primer uso premeditado fue en las pirámides de Giza, que tienen pendiente convexa, que produce profundidad y grandeza. Los pueblos mesopotámicos, por su parte, también utilizan el recurso en sus zigurats, construidos sin ángulos perpendiculares, donde todos los lados son levemente curvos, generando la percepción de que se levantan como parte del paisaje. Abajo: ilustración propia del zigurat de Ur, en Irak, 2100 a.C.
https://algargosarte.blogspot.com/2014/09/el-templo-griego-partes-caracteristicas.html
Las correcciones ópticas del Partenón
Quizá el edificio más célebre donde se utilizó la éntasis fue el Partenón, construido en el 431 a.C., en la cima de la Acrópolis de Atenas.
Algunos estudios sugieren que, además, se usó para otorgar resistencia estructural, y estabilidad a las columnas grandes. Sin embargo, la razón más difundida es que como el templo debía representar perfección, el arquitecto se permite corregir medidas, y “distorsionar” la construcción. Así, el fuste es más ancho en el centro (éntasis) para corregir el estrechamiento. En la imagen inferior, se describen estos recursos, en su fachada.
http://construcciontradicionalgeometrica.blogspot.com/2018/02/entasis-de-una-columna.html
https://revistas.unav.edu/index.php/revista-de-edificacion/article/download/35026/31110/

Esta distorsión, o refinamiento premeditado, fue reintroducido en la arquitectura renacentista por los arquitectos Andrea Palladio, y Jacopo Vignola. El periodo del Renacimiento trae luego un interesante aporte al método, a través de los tratados. La éntasis se provee de norma, pudiendo seguirse una guía de pasos, de cómo diseñarla correctamente.
Dentro de la adaptación a la apreciación, en la Villa Capra (1566), Palladio, aparte de la leve éntasis en sus columnas jónicas, recurre a otros ajustes. De los cinco intercolumnios, presentes en las fachadas, se puede apreciar que el del centro es algo más pronunciado, en correspondencia con el ancho del acceso principal. Así esto podría interpretarse como otra "corrección visual", casi imperceptible (arriba).
Arriba y abajo: bocetos propios de la Acrópolis de Atenas (Grecia), y el Zigurat de Ur, en Irak.
Correcciones ópticas en las letras de la Bauhaus
https://tiposformales.wordpress.com/2010/09/12/correcciones-opticas/
¿Qué tienen en común la letra “Futura” y las columnas del Partenón?
Para evitar percibirlas con distorsión, también se aplican modificaciones a las fuentes, o tipos de letra.
A partir de estudios, de mediados del siglo XX, se da a lugar a una serie de correcciones en tipografía. En esta fecha, cambio de folio entre la arquitectura clásica y moderna, las letras también debían representar esta transición, e incluso comunicar cambios políticos y sociales, pensando una imaginería de afiches, letreros, y documentos.
Por ejemplo, las letras curvas empiezan a ser levemente más grandes que las cuadrangulares, para verse del mismo porte. Algo similar ocurre con las agudas, por lo que su forma debe sobrepasar la línea superior, en el caso de la A, o la línea base, en el caso de la V, y W.
En 1924, Paul Renner, tipógrafo inspirado en la Bauhaus, crea la fuente “Futura”, bajo el lema "La letra de nuestro tiempo". Con el entusiasmo de una nueva época, Renner busca simplicidad, evitando decoraciones, e incorpora correcciones visuales. Así se basa en círculos, cuadrados y triángulos, de acuerdo a los postulados del modernismo, en especial de los movimientos De Stijl y Bauhaus.
De esta forma concibe “Futura”: letra que evoca un mañana prometedor, un renacer, valores estéticos y conceptuales que representa la Nueva Tipografía, que servirá de inspiración para muchas otras fuentes de este estilo (de palo seco, geométricas y neutras).
La fundición Bauersche Giesserei la presenta en 1927. Vanguardia entonces, hoy todavía se considera una fuente moderna, que transmite progreso, y se ha utilizado en todo tipo de eventos (viaje a la luna, Olimpiada soviética).
https://es.wikipedia.org/wiki/Futura
https://design.tutsplus.com/es/articles/all-about-futura-font-and-its-history--cms-35382
Ante la llegada del nazismo, en los años 30, los tipos de letra modernos, incluyendo Futura, fueron rechazados, buscando mostrarse una identidad, que en principio representó “Fraktur”, la letra gótica alemana, convertida en estándar. Sin embargo, en los 40, el régimen la considera similar al tipo hebreo, también de aspecto cuadrangular, y la prohíbe. El motivo del cambio de criterio inesperado es el descubrimiento de que “Fraktur” posiblemente no es una “letra aria”, sino tal vez una transposición de tipos “Schwabach”, de origen hebreo. Interesante tema, con origen seguramente en las autoridades de la época, y la búsqueda de asimilación al judeocristianismo.
Así, “Fraktur” es prohibida, a través de una circular, de 3 de enero de 1941, firmada por Martín Borman, quien ordena dejar de usarla, debiendo reemplazarse por “Normalschrift” (letra normal, como pasa a denominarse a “Antiqua”), tipo de origen romano, y orden clásico.
Durante la Segunda Guerra Mundial, fueron utilizados muchos sans serifs modernos diferentes por el ejército estadounidense, y Futura fue la fuente más destacada. Después, cuando la NASA necesitaba una fuente para la placa que el Apolo 11 dejaría en la luna, se eligió Futura.
Futura luego vuelve, desde el intervalo de los años 30, y como conclusión nos parece que el modernismo es lo correcto. Seguimos estudiando la éntasis, porque es un avance. Es lo nuevo, es el proceso de conocimiento. Como dice alguien, “no se detienen los procesos sociales”. Las investigaciones objetivas se pueden atacar, pero continúan su curso.

Deformación en la fotografía y percepción de la Tierra redonda
El movimiento en el que estamos, dentro del universo, da un punto de vista no estático. Aprendemos por ejemplo a hacer croquis con verticales “muy rectas”, pero ocurre que desde lo alto, y la lejanía, las líneas verticales se “perspectivan”, toman un foco, se “deforman”, luego a través de croquis es posible darse cuenta de que se simplifica, intuitivamente.
En la Tierra, todo está en movimiento. Las mismas sombras, no son iguales en todas partes. Hace poco, por ejemplo, veía nuevamente la explicación de Carl Sagan de por qué la Tierra es redonda, "con una cartulina y dos palos". Y la correcta estimación de su circunferencia, a través del cálculo de Eratóstenes.
https://www.youtube.com/watch?v=I_v4VpfIyxU

Conclusiones
Viendo ejemplos, se puede pensar luego cómo aplicar éntasis a nuestros proyectos, sin necesariamente abultar, siendo literal, sino entenderlo como algo más genérico, como concepto.
Estaba pensando que la “mano” de un arquitecto es una forma de éntasis natural, un adaptarse, dentro de lo abstracta que es la arquitectura contemporánea. El desarrollo del croquis favorece una éntasis o sentido de proporción implícito. Es la visión personal de alguien, su impresión.
Resulta notable la concepción arquitectónica de los Propileos de la Acrópolis, edificio elogiado por Le Corbusier en “Hacia una Arquitectura”, que en sí mismo mitiga la diferencia de nivel existente entre exterior e interior, de la meseta de emplazamiento. Una comprensión tridimensional, inspiradora para el modernismo.
Actualmente, afino últimos detalles de mis proyectos en cuanto estructura, lo que me ha tenido bastante ocupado. En el proyecto de gimnasio auditorio, por otra parte, he estado procurando sensibilizar las llegadas a la calle. Por seguridad, y asimilación, se emplea albañilería reforzada en la parte inferior, estucada por ambos lados, y revestimiento Isopol, a contar de los 3 metros, en la parte superior, como contraste.
Me ha preocupado estos días especialmente la proporción en las plantas de una vivienda, que actualmente ejecuto, en una zona rural, y también para las estructuras del gimnasio.
La idea de un pop up inmersivo, por otra parte, ha surgido este tiempo en mis descansos. Concebir soportes de pop ups distintos, para “Las casas de la Historia”, por ejemplo. Nuevos mecanismos, que me muestren cosas nuevas: deslizamiento y descubrimiento, e ideas atractivas, como el libro túnel, por ejemplo. Veré si puedo desarrollar esta imagen. Por mientras, procuro mezclarlos con pinturas, y con acuarelas, que tengan un aspecto menos homogéneo, pictórico. Abajo: Villa Capra, probando la textura del papel fabriano.
La idea de un adentro, en un libro, me ronda (abajo). Como otras veces, tal vez necesite un posteo especial para mostrar mis avances, y ordenarme.
He pensado finalmente que la presentación de arquitectura, la conocida “entrega”, que se enseña en las facultades, puede ser una cortesía, un acercamiento, o sensibilización, de una idea que aparece en principio en bruto. Una sensibilización de la idea. Si nos fotografiamos de cerca, por otra parte, estamos más “deformados” de cómo nos vemos en una foto frontal. Una toma dirigida a la barbilla, mirando hacia arriba, es bastante “realista”, deforma o vuelve poco estética la cara. Se puede pensar que estamos mostrando lo mejor de nosotros, siempre, y tal vez esa formalidad es una forma de deferencia. La arquitectura es similar: es mostrar una buena fotografía, en el fondo de un terreno indeterminado.
Más allá de las geometrías, se puede pensar cómo se hacen valer los sentidos, incluso pensando arquitectura para gente ciega, o con problemas de motricidad. Tal vez tiene que ver con cómo acercamos la idea, a través de la percepción, a través de los sentidos.
Lo que nos deja finalmente la éntasis: las cosas no son “matemática para nadie”, sino que están hechas para la percepción humana.
Texturas de papel fabriano.